Al menos era sincero. El negocio del jazz nunca fue tan boyante.
Ya sabes: o tocas jazz o haces dinero, pero las 2 cosas juntas, ná de ná, salvo que te llames Miles Davis o Wynton Marsalis, naturalmente.
Al menos era sincero. El negocio del jazz nunca fue tan boyante.
ResponderEliminarYa sabes: o tocas jazz o haces dinero, pero las 2 cosas juntas, ná de ná, salvo que te llames Miles Davis o Wynton Marsalis, naturalmente.
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